“Un universo debajo de las piedras”
Yolanda Sáez del Río
Bajo la mirada infantil, el título del presente texto
puede adquirir un sentido diferente al que, a priori, pudiera tener para un
profesional científico. Ahora sí, yo creo que todos, al leer esta frase con la
mirada de nuestra niñez, recordamos lo emocionante que era descubrir mundos
nuevos en la naturaleza. Como levantar una piedra y comprobar el ajetreo de vida
menuda que aflora de la nada.
La inspiración para esta entrada la he encontrado en la
sencilla guía didáctica de Rachel Carson “El sentido del asombro”. Me parece un
relato muy interesante para relacionar y recalcar la importancia que tiene la
educación en valores como el respeto al medioambiente para el desarrollo de una
sociedad madura y civilizada. No cabe duda que el contacto con la naturaleza
aporta numerosos beneficios en la formación de la persona, tanto a nivel cognitivo
y emocional, como cultural y social.
Rachel Luise Carson (1907 – 1964) fue una bióloga que
contribuyó en la concienciación ecológica de la sociedad. Su trabajo más
conocido es “La primavera silenciosa” donde denunciaba el uso de pesticidas con
DDT y los daños que causaba en la cadena trófica de seres vivos afectando
principalmente a las aves rapaces. Grupos ecologistas de los años 70 tomaron el
relevo de esta denuncia y el DDT terminó siendo prohibido para uso agrícola en
la mayor parte del mundo.
“El sentido del asombro” es un escrito mucho más íntimo y
personal donde muestra, a través de los ojos de su sobrino, una sensibilidad
hacia las pequeñas cosas de la naturaleza. Este fue un proyecto inacabado ya
que la autora murió repentinamente en 1964 a la edad de 56 años, pero quedó
plasmada en la breve guía didáctica cómo, a través del acompañamiento de un
adulto, se puede inculcar la capacidad del asombro, la curiosidad y la
sensibilidad hacia los “misterios” de la naturaleza.
Carson nos muestra con esta obra el viaje que recorre con
su sobrino a través del sencillo contacto con la naturaleza. Señala el camino
de cómo los adultos pueden acompañar a los niños en la construcción de una
personalidad curiosa con el mundo que les rodea y les ayuda a su vez a
desarrollar una actitud crítica en el sentido de preguntarse el porqué de las
cosas. En este caso, Rachel no se dedica a transmitir los conocimientos que
tiene sobre Biología. Acompaña a su sobrino en el descubrimiento de detalles en
los que muestra interés provocando en el niño la misma sensación. Se dice que
aprendemos por imitación, y en este caso se cumple la norma en tanto en cuanto
el sobrino reproduce el mismo interés que observa en su tía. Esto nos da una
referencia de los importante que es el acompañamiento de los adultos durante el
aprendizaje de los niños.
Es muy interesante cómo este sencillo libro nos descubre
los numerosos beneficios que se pueden obtener de la educación en contacto con
la naturaleza. En la actualidad, las metodologías más innovadoras sobre educación
promueven el contacto con la naturaleza. En una sociedad en la que predomina la
masificación en ciudades y también en las aulas, las salidas al campo
constituyen un soplo de aire fresco para las pequeñas mentes en desarrollo.
Apartar la vista de las pantallas y descubrir las mejoras cognitivas y
emocionales como, por ejemplo: mejora de la atención, disminución del estrés,
mejora del autocontrol, incremento de la motivación y el compromiso activo,
promueve la actividad física, mejora el contexto del aprendizaje y las
relaciones sociales o facilita el juego y la creatividad. Numerosos artículos
académicos avalan estas afirmaciones.
Han pasado más de 50 años desde la edición de este
sencillo escrito y parece que su mensaje se encuentra de plena actualidad.
Tanto las nuevas metodologías educativas como algunas terapias con animales son
indicativos de lo acertado que era el discurso medioambiental de la escritora y
bióloga. Existen terapias relacionadas con la educación como la llamada
“Educación asistida con animales” para mejorar la motricidad, corregir
comportamientos agresivos, mejorar las habilidades sociales, mejorar la
autoestima…
No cabe duda que esta pequeña guía didáctica representa
una metáfora a la vuelta de la transmisión de conocimiento ancestrales. Como
antaño se hacía vía maestro-discípulo o de padres a hijos. En una sociedad cada
vez más individualista y consumista el contacto directo con la naturaleza y
entre humanos es vital. Ese acompañamiento del adulto con el niño en el
descubrimiento del mundo se torna fundamental para la construcción de unas
sociedades donde los individuos posean una empatía y un sentido crítico para
mantener un desarrollo sostenible. Esta adquisición de valores se conseguirá no
solamente con la adquisición de meros conocimientos científicos sino también de
valores morales y bioéticos. Una ciudadanía formada científicamente pero
también formada en valores conducirá a la formación de una sociedad más libre
donde su capacidad crítica pero también su empatía la llevará a poder tomar decisiones
más justas.
Fuentes:
Rachel Carson, mujeres con ciencia https://mujeresconciencia.com/2020/10/28/rachel-carson-y-el-sentido-del-asombro/
Beneficios del aprendizaje en contacto con la naturaleza https://escuelaconcerebro.wordpress.com/2019/12/30/beneficios-del-aprendizaje-en-contacto-con-la-naturaleza/#:~:text=El%20contacto%20con%20la%20naturaleza%20fomenta%20las%20buenas%20relaciones%20y,desarrollo%20f%C3%ADsico%2C%20cognitivo%20y%20socioemocional.&text=Como%20siempre%20decimos%2C%20lo%20m%C3%A1s,en%20y%20para%20la%20vida.
Beneficios de la terapia asistida con animales https://www.hvcruzcubierta.com/beneficios-la-terapia-asistida-animales-ninos/#:~:text=La%20Terapia%20Asistida%20con%20Animales%20de%20Compa%C3%B1%C3%ADa%20(TAA)%20es%20un,en%20grupo%3A%20desde%20ni%C3%B1os%20autistas
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